10 Beneficios sobre la salud del ser humano
¿Puede un paseo por el bosque hacerte sentir rejuvenecida (o)?. A veces, sólo lo que vemos y olemos parece tener un efecto calmante y restaurador. Investigaciones científicas recientes evidencian que el tiempo que dedicamos en estar en los bosques tiene un efecto terapéutico sobre la salud humana.
Las investigaciones están mostrando en la práctica una serie de beneficios para la salud. Los efectos son cuantificables y significativos, sin embargo, las personas no entienden exactamente cómo y por qué ocurren. Se sugiere que es a través de la acción de phytoncides, una clase de sustancias químicas presentes en el aire, emitidas por las plantas para protegerse de la descomposición y la depredación de los insectos.[1]
TODO lo anterior indica que tan sólo sentarse o caminar en un bosque, parque o jardín, con mucha vegetación, tiene efectos terapéuticos.
Estas sustancias han demostrado mejorar la función inmune en los seres humanos. Los phytoncides no son más que un posible desencadenante. En un estudio se identificaron 120 productos químicos volátiles en el aire en un bosque de Sierra Nevada, de los cuales sólo 70 pudieron ser reconocidos.
1. Disminución de los niveles de glucosa en sangre en pacientes diabéticos
2. Disminución de las hormonas del estrés
3. Disminución de la frecuencia cardíaca
4. Disminución de la presión arterial
5. Relajación general del cuerpo humano (aumento de la actividad del sistema nervioso parasimpático)
6. Posible incremento en el sistema inmunológico (cortisol se asocia con reducción de la función inmune mayor)
7. Disminución de la depresión
8. Disminución de la ira
9. Disminución de la fatiga y la confusión
10. Mayor vigor psicológico
¿ Qué estás esperando ?
Ahora existe una justificación científica para pasar mayor tiempo en contacto con la Naturaleza
2 La ciencia de Volumen Total Environment 112, Temas 2-3, marzo de 1992, Páginas 233-250
3 Revista Internacional de Biometeorología, 1998; 41:125 – 7
4 Salud Ambiental y Medicina Preventiva de 2010: Volumen 15, Número 1, 18 a 26
5 La biología del recién nacido, de 2000; 78 (1) :70-2
Fuente documental http://blog.kevinsink.com/archives/438
Simplemente maravilloso..
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